Las 5 mujeres que persiguen la corona del pop

Caída en desgracia Christina Aguilera, comprobado que Katy Perry no da para mucho más, que Alesha Dixon no supone ningún peligro, que a Britney Spears le está costando horrores volver a ser la que era y que a Madonna se le ha complicado después de que M.I.A. le robase todo el protagonismo en la Superbowl (contraatacará con una aparición estelar en la serie «Glee»), el póquer de divas formado por Beyoncé, Rihanna, Shakira y Lady Gaga tiene enfrente una nueva hornada de chicas aspirantes a la sucesión, a las que vigilarán de cerca durante 2012.

Azealia Banks
Esta chica de 20 años criada en Harlem aún no ha publicado su debut oficial, pero el videoclip de «212» ha arrasado en internet de tal manera que ha fichado con una multinacional que lo editará en septiembre (un EP servirá como aperitivo el 25 de marzo). Su popularidad en el mundillo hip-hop casi ha igualado a la de Nicki Minaj en un tiempo récord, y su habilidad para mutar de rapera deslenguada a virtuosa del R&B pondrá en guardia a Beyoncé y Rihanna. Su naturalidad es creíble y cae tan bien a los fans de la música mainstream como a los de la independiente. Se declaró bisexual en una entrevista con «The New York Times».

Lana del Rey
No sería una diva al uso porque su lánguida propuesta queda al margen del pop bailongo de estadio, pero estar en boca de todos antes de debutar discográficamente era señal inequívoca de que algo grande se avecinaba para ella. Con su debut, «Born to Die», ya triunfando en la listas de ventas, ha llegado el notición: actuará en el Sónar de Barcelona en junio. Su punto fuerte es la falta de rivales en su estilo. Las británicas Duffy y Adele (cuyas ventas acaban de superar a las de Michael Jackson en Inglaterra) quizá sean las que más perderían si Lana subiese como la espuma. Su debilidad es que muchos la consideran un producto de marketing —el «New York Times» la llamó «fraude»—. También se criticó mucho su aparición en «Saturday Night Live» sin tener siquiera disco en la calle, y para su desgracia —y goce de sus detractores— la actuación resultó un fiasco —si no baila, desafinar está prohibido para una diva— de consecuencias inmediatas: según «Rolling Stone», sus managers decidieron retrasar su gira hasta que pasara el vendaval.

Kat DeLuna
Nacida en el Bronx y de padres dominicanos, Kathleen Emperatriz DeLuna lo tiene todo para ser la nueva bomba latina: sensualidad maquillada de inocencia, letras spanglish, estribillos pegadizos, y además por fin ha dado con un hit realmente irresistible, «Drop it low». No haber llegado antes a oídos del gran público español ha sido su gran fallo de mercadotecnia. Para ella es ahora o nunca.

Jessie J
«Sonido de 2011» según la BBC, la debutante que más discos vendió en Reino Unido en 2011 ha puesto el ojo en el resto del mundo. Parece obsesionada con el éxito, requisito imprescindible en esta lucha sin cuartel, pero ya brotan los enemigos desde todos los flancos. Un tótem del pop británico como Noel Gallagher acaba de decir que hace «música de porquería».

Ke$ha
Hace valer sus contactos con rockeros como Alice Cooper o Flaming Lips, en cuyo próximo disco participa junto a estrellas como Yoko Ono, Nick Cave o Bon Iver. Pero el equilibrio psicológico parece su punto flaco. Su última declaración ha sido: «Cuando me deprimo me gusta vestir a mi asistente de pene».

Fuente: ABC